Por Fer Tau
En estos días no pasa nada, o casi nada. Todo es rutina o como la meseta en el ánimo social que estamos viviendo. La cuarentena aplana cualquier curva, cualquier emoción. Todo muy chato, la gente se va desanimando de a poco, la mayoría aprende rápido las pautas de convivencia, le pone ganas pero no ve la línea de llegada, estamos como la tripulación de Cristóbal Colon en alta mar, cuando no se sabía si realmente llegarían a algún lado continuando esa ruta, navegando. Esperemos llegar a tierra antes del 12 de octubre, porque la partida de las carabelas fue un 3 de agosto de 1492. Estamos a mediados de mayo, nos faltan muchos días para llegar al próximo 3 de agosto pero ya nos estamos, no amotinando, sino cuestionando hasta qué vamos a hacer para tratar de modificar nuestra rutina diaria. Y las carabelas aún no zarparon. ¿Cuándo va a ser nuestro 12 de octubre? Sería muy bueno llegar a algún lado sin tirar a nadie por la borda y sin que se nos amotinen. Aunque lo mejor sería poder saber hacia dónde vamos y cuándo llegaremos, pero eso no lo saben ni Trump, ni los chinos, ni Ojeda. Andando se hace el camino.
174 personas con ganas de contagiarse COVID-19 no cumplen con la cuarentena
Continúa la cuarentena y las tendencias mundiales llegan a Malargüe, sobre todo la que se llama COVIDIOT, una mezcla entre COVID-19 e idiota, tan claro que no sé por qué lo explico.
La cuestión es que todos estamos haciendo un gran esfuerzo para acatar las medidas de seguridad y respeto al prójimo. Nuestra clase dirigente se devana los sesos para que tengamos un aislamiento ordenado, pero, siempre están los que patean en contra con ganas. Había leído por ahí que “no estamos en el mismo barco, estamos en la misma tormenta” y, de acuerdo a la info suministrada por la policía de Malargüe ya se detuvieron a más de 174 personas por violar la cuarentena.
A veces nos puede pasar que hay que ir a la farmacia a cualquier hora de la noche, si nos para la policía le mostramos el medicamento junto a su ticket de compra y enfilamos para la casa, peeero estos COVIDIOT, cuando son interceptados por la ley, en vez de mostrar el medicamento o justificar por qué están circulando a altas horas de la noche, le quieren convidar ferrrné al oficial, le suplican que no le hagan multa y en el peor de los casos se le discute al policía tratando de convencerlo que está equivocado, que no fue penal.
¿Próxima parada? El Residencial Comisaría Inn, ahí serán alojados un tiempo prudencial, el vehículo será estacionado en el parking de la institución teniendo que abonar un ticket para retirarlo. Habría que consultar a estos personajes por qué hacen tanta fuerza para contagiarse y faltarnos el respeto de esa manera, sería buena idea que los nombres de estos COVIDIOT sean públicos. Y si el hisopado da positivo, demuestra las ganas de enfermarse que tienen y, sobre todo, de contagiar. Hagamos bien los deberes así más pronto se podrá levantar la cuarentena.
La discriminación no es chiste
En esta semana fue motivo de debate la humorada que quiso hacer un empleado público, periodista, en desmedro de los que asisten a la escuela Aborigen americano. Hoy en día. y desde hace tiempo, se mira con la lupa que hace cada uno en las redes. Este señor quiso hacer una humorada de dudoso gusto, que a veces pasa desapercibido, hasta ignorada si lo hace cualquier mortal. Pero él no, tenía exposición pública. A veces es mejor parecer serio y aburrido antes que demostrar que se es otra cosa. Ya está, aprendió y aprendimos todos para no pisar el mismo palito. Si esta bomba no se desactivaba pronto hasta el INADI intervenía, tal vez no era para tanto.
Falleció Raúl Rodríguez
Desde Roca 0 van nuestros respetos a la familia del profesor Raúl Rodríguez, ex intendente de Malargüe, con una vasta trayectoria, siempre dispuesto a colaborar en la gestión pública, presente tanto con el radicalismo como con el justicialismo, más allá de las banderas políticas siempre en aras del bien de Malargüe. No estaría mal imitar su accionar tanto en el deporte como en la política, digo, para hacernos cargo del legado que dejó.









