El intendente Juan Manuel Ojeda firmó un convenio con el consorcio de cooperación Altas Cumbres que busca instrumentar herramientas para combatir la corrupción entre el sector público y privado, capacitaciones laborales y seguridad jurídica internacional a los contratos privados que se realicen en Malargüe.
El consorcio de cooperación internacional Altas Cumbres está formado por empresas y profesionales de distintos ámbitos que trabajan en la seguridad jurídica. Malargüe es el primer municipio del país que se suma a la organización.
Altas Cumbres da la posibilidad de que sus miembros celebren contratos basándose en un código de ética que los rige particularmente, en el control de corrupción entre sí, hacia dentro de sus instituciones, y respecto de proveedores o terceros y especialmente formando una especie de «burbuja en seguridad jurídica».
«Mediante este convenio con el consorcio, le daremos seguridad jurídica a los contratos que se celebren en Malargüe», explicó el intendente.
«Los privados que celebren contratos en Malargüe serán regidos por el consorcio y podrán recurrir a un tribunal arbitral internacional para resolver sus conflictos», señaló.


Ana Laura Ochoa, presidente de Altas Cumbres, indicó “este es el punto de partida para avanzar en una nueva forma de hacer negocios en Argentina”.
Explicó que el consorcio cuenta con un banco de proyectos de inversión, ofrece llegar a tribunales arbitrales con jueces internacionales y una fundación que busca generar combatir la marginación, la pobreza y el escepticismo, sustituyendo la cultura del asistencialismo y la especulación por la cultura de la proyección y el trabajo.
“Decidimos dar una batalla frontal a la corrupción, la causa principal del fracaso de Argentina. Hoy Argentina representa el 0,0025 % del comercio total de occidente, por ello las empresas y organizaciones del Consorcio cuentan con un programa de transparencia institucional y un código de ética, que vamos a armarle al municipio de Malargüe en primer lugar” indicó Ochoa.


Adelantó que Altas Cumbres transmitirá a los establecimientos educativos y organizaciones intermedias los valores que postula basados en los principios del triple impacto: rentabilidad, sostenibilidad e impacto social en cada uno de los emprendimientos.
«Este convenio puede ser la base real del desarrollo del departamento en el futuro. Cuando decidimos firmarlo lo que estamos haciendo es armar una burbuja del resto del país. Con el consorcio funcionando en Malargüe, le podemos dar seguridad jurídica a los empresarios», agregó Ojeda.
En cuanto a la rentabilidad para el municipio, el intendente sumó además que con la sola firma de los contratos en Malargüe, para que sean administrados por el consorcio, aunque las actividades de las empresas se desarrollen en otros sitios, por el sellado del contrato ya le ingresará a la Municipalidad un porcentaje de la inversión.

Quienes firmen contratos en Malargüe y decidan ser administrados por el consorcio, podrán «en caso de que existiera algún conflicto, decidir cuál es la ley aplicable, el costo del proceso, el tiempo y cuáles son los jueces que lo van a resolver».
Para verlo funcionar habrá que esperar a que los primeros contratos empiecen a celebrarse en el municipio aunque, de antemano, el intendente confió que «este convenio puede ser la base real del desarrollo del departamento en el futuro».
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