La municipalidad de Malargüe puso a disposición del hospital Malargüe y del Área sanitaria Malargüe las instalaciones del Salón de Usos Múltiples (SUM) del barrio Martín, en el marco de la emergencia COVID-19, a efectos de descongestionar el centro de salud 129 del barrio Gustavo Bastías y para efectuar testeos de coronavirus a los transportistas con domicilio en Malargüe que salgan fuera de la provincia.
El SUM se encuentra ubicado en la esquina de Anglat y Barrera del populoso barrio. Allí por la mañana funcionarán los consultorios de niños sanos y control de embarazadas que hasta el momento lo hacían en el centro de salud 129 y, desde las 14:00, se realizarán los tests rápidos a transportistas malargüinos que viajen a otras provincias y provengan de otros puntos del país.
“Esta medida es circunstancial, mientras dure la emergencia COVID, para evitar la aglomeración de personas, ya sea en el hospital o en centro de salud. Le pedimos al municipio y lugar físico y se nos ofreció este lugar, que está sin inaugurar” indicó el Dr. Alfredo Martínez, Director del hospital y del Área Sanitaria.
El funcionario indicó que el testeo a transportista consiste en un análisis de sangre rápido en el cual se busca identificar anticuerpos al COVID-19. La toma de muestras, por orden de llegada, será de 14:00 a 17:00, dado que de 17:00 a 18:00 se entregarán los resultados. No es necesario que los transportistas cumplan un ayuno previo.
El test es obligatorio para los transportistas que salen de la provincia y su validez es de 15 días.
Cabe destacar que se han dispuesto entradas independientes para los consultorios de la mañana y la actividad de la tarde.
El intendente Ojeda destacó “esto no es una inauguración. Estamos en una emergencia de una pandemia y los recursos, que son del pueblo, se disponen en la medida que se van teniendo las urgencias. Ya llegará el tiempo de la inauguración, no nos interesa la foto para inaugurar, nos intereses que los edificios sirvan en el momento oportuno”.
Ojeda destacó que se han pago 75 millones de pesos en concepto de obra pública, entre ellos el SUM del barrio Virgen del Carmen, que podría también destinarse a la emergencia COVID-19 sin haberse inaugurado oficialmente.
La presidente de la Unión vecinal del barrio Martín Güemes, Silvia Sepúlveda, cuestionó que el municipio no le haya comunicado a la entidad con antelación el destino que se dará por estos días al edificio ahora cedido a la autoridad sanitaria.
“Vinieron, trajeron todas las cosas y yo me enteré por un vecino, no me enteré por la gente del municipio. Quiero llevar tranquilidad a mis vecinos, como me ha dicho el Dr. Martínez y el intendente, que esto es momentáneo. Este lugar fue soñado por mucha gente grande que está en su casa recluida y no puede salir. El día que esto se inaugure debería ser cuando toda la gente pueda salir a la calle para que venga a verlo” puntualizó la dirigente.
El intendente se comprometió a mejorar la comunicación con la unión vecinal, remarcando que la emergencia obligó a actuar rápidamente sobre la ocupación de las instalaciones que le corresponden “al pueblo de Malargüe. En una época de crisis los recursos están para usarlos”