Por segunda vez en sus 40 años, Marcelo Fabián Collado (40) escuchó como era condenado por un abuso sexual. Al igual que en 2008, ahora también atacó a una niña menor de edad en Malargüe. Pero en este caso su situación se vio agravada porque la dejó embarazada y la víctima tiene una discapacidad mental.
En los últimos días, tras pasar por un juicio abreviado donde admitió haber cometido el hecho, el hombre recibió una pena de 10 años de prisión bajo la calificación de abuso sexual con acceso carnal agravado por estar encargado de la guarda de la víctima.
El pacto fue acordado por la fiscal Andrea Lorente y el abogado defensor Javier Pérez, bajo la anuencia del juez Ariel Hernández. Tras escuchar la sentencia en su contra, Marcelo Collado quedó alojado en la penitenciaría -estaba con prisión domiciliaria- donde continuará cumpliendo la pena en su contra.

Doblemente abusador
En los últimos días de junio de año pasado, una mujer llevó a su hija de 14 años a un centro de salud ubicado en Malargüe ya que tenía un atraso en su período. La derivaron al hospital Enfermeros Argentinos donde los médicos le diagnosticaron que efectivamente estaba embarazada. Al ser una menor de edad, se aplicaron los protocolos correspondientes y se entrevistó a la niña y a su madre.
La progenitora incluso radicó la denuncia judicial. En ese relato detalló que su hija, quien tiene un retraso mental moderado, le confesó que había tenido relaciones sexuales con un adolescente de 15 años que había conocido fuera de la escuela. Sin embargo, la menor le había dado otra versión a los médicos que la atendieron: que había sufrido un abuso sexual por parte de la pareja de su madre.

El hombre fue identificado como Marcelo Collado, un comerciante que se dedicaba a vender harina en Malargüe, con pasado laboral en Vialidad Provincial, según detallaron fuentes ligadas a la investigación.
El sujeto fue detenido y tiempo después llegó una prueba que lo dejó entre la espada y la pared: el cotejo de ADN con el feto arrojó resultado positivo. Esto derivó en que la víctima se realizó una interrupción voluntaria del embarazo y el hombre pasó a la penitenciaría.
Además de la reciente condena a 10 años de prisión, Marcelo Collado tenía un antecedente similar. El 6 de enero de 2008 había tocado en sus partes íntimas a una niña que fue a comprar al kiosco que tenía y luego le dio una moneda de 10 centavos para garantizar su silencio. Por ese hecho había sido condenado a 4 años y 9 meses de prisión por abuso sexual gravemente ultrajante.
Fuente: Diario Uno.
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